¿Cómo se cambia el color de las piezas de titanio?
¿Qué es el titanio?
Metal abundante en la Tierra que presenta buenas propiedades mecánicas, baja densidad, resistencia a la corrosión y, además, es biocompatible. Estas características hacen que el titanio y sus aleaciones sean muy utilizados en una gran variedad de aplicaciones tecnológicas, sobre todo en la industria médica, química, naval y aeroespacial.
¿Cómo cambiar su color?
Existen distintas técnicas para llevar a cabo la oxidación superficial del titanio para producir su coloración, como son el tratamiento térmico, el procesado con plasma o la oxidación electrolítica. No obstante, existe una alternativa interesante: el tratamiento superficial con láser; el método de anodización («incrementar el espesor de la capa natural de óxido en la superficie de piezas metálicas») se puede llevar a cabo sumergiéndose primero en ácido fosfórico (la Coca-Cola también sirve, y alternativamente el bicarbonato) o aplicando esa capa con una brocha y enchufandolo luego a los polos de una batería, por ejemplo con unas pinzas de cocodrilo – con cuidado de que el cortocircuito no sea demasiado salvaje. Con el aluminio se consigue un efecto parecido; esta es la forma en la que se colorean algunos gadgets y piezas metálicas de complementos.